pez espada a la plancha

Bruschetta de pez espada

Se pasó enero al galope, y arrancó febrero con trotecito sostenido. Todo pinta para que  -con la ayuda de los feriados de Carnaval- este mes también nos  resulte muy corto.  A pesar que ya se ve más gente circulando por la ciudad, retornando a sus actividades,  aún se siente el  ambiente distendido, como queriendo estirar las vacaciones.  Mis hijos también vienen regresando a casa, pero he decidido que no es suficiente motivo para abandonar mi recién estrenada costumbre de ir a explorar la pescadería del barrio. Esta semana le tocó el turno al pez espada.

Lo quería servir de una forma divertida para una cena informal. Ya te habrás dado cuenta que tengo debilidad por las tapas como forma de presentar los alimentos, así que me puse en campaña de encontrar una forma de cocinar el pez espada que se pudiera adaptar al tapeo.

Al final, lo cociné a la plancha para  permitir que  luciera, tanto  la consistencia como el sabor de su carne.  Lo serví sobre tostadas, con rúcula y huevos de codorniz poché que funcionaron como  «la frutilla del postre».  Le podía haber agregado cebollas confitadas o un toque de criollita, pero preferí dejar que el pez espada fuera  el centro indiscutido en este plato.

Ingredientes:

  • un trozo de  de pez espada de aproximadamente 200 grs
  • 4 rodajas finas de pan tostado (yo uso alguno que tenga granos)
  • aceite de oliva
  • sal
  • pimienta
  • rúcula
  • 4 huevos de codorniz

Si el trozo de pez espada es muy grueso, podés cortarlo a lo largo para que con unos pocos minutos en la plancha,  de cada lado, quede dorado y cocido (a mi punto, tal vez a vos te guste un poco menos cocido).

Si hacés las tostadas al horno, te recomiendo agregarle unas gotas de aceite de oliva, o frotarlas con ajo.  De esa forma resultarán mucho más sabrosas.

Colocar el pez espada sobre las tostadas, adornar con hojas de rúcula previamente lavadas, y terminar con los huevos poché.  Me parece que los huevos de codorniz son ideales, ya que -por tamaño- no invaden el plato.

Hervir agua con sal en una cacerola, y una vez llegado a punto de ebullición, bajar el fuego y revolver vigoramente en el centro de la cacerola, hasta  armar un remolino.  Agregar el huevo y dejar que se cocine más o menos dos minutos hasta que la clara esté cocida y la yema quede tierna.

Agregar los huevos poché, sobre las tostadas y terminar con unas gotas de aceite de oliva, sal y pimienta antes de llevar a la mesa.

Una bandeja con dos bruschettas o tostas de pez espada, una copa de vino blanco, la tele con tu serie favorita…  Me parece que te estoy sobrando.

logo de las recetas conversadas

Inicio

Recetas

 

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *