Si estos días invernales te tienen un poco bajoneado, te voy a recetar este ensopado. Tiene propiedades mágicas, te entibia la panza y el corazón. Mi abuela le decía guiso de campaña, y lo cocinaba en una gran olla para alimentar a los nietos que nos instalábamos en su casa durante las vacaciones invernales.
Todo era una fiesta en esas estadías: salir a caminar por el campo, cruzar las cañadas, pescar, alimentar y perseguir a los animales. En esas actividades se nos pasaba el día; y únicamente el sonido de la campana llamando a la mesa, ponía un paréntesis en nuestras andanzas.
Ella preparaba este ensopado -y otros manjares- sobre el fuego de la cocina a leña, que además servía como calefacción para la casa. Y de allí se escapaban los aromáticos vapores que nos hacían apretar el paso. Íbamos entrando en fila india, escondidos bajo las camperas, gorros y bufandas, y desfilábamos bajo el ojo avizor de mi abuela que se aseguraba no hubiera accidentados. Veníamos sucios, helados y felices.
A todo eso sabe este ensopado: a heladas en el campo, a corderos guachos, al monte, a aventuras con primos; y sobre todo a la cocina y a la risa de mi abuela.
Ingredientes:
- 1/2 calabacín
- 3 papas
- 2 boniatos
- 2 zanahorias
- 1 cebolla
- 2 choclos
- 3 dientes de ajo
- 2 hojas de laurel
- 6 muslos cortos (lo podés hacer también con algún corte de carne de vaca)
- 250 fideos secos: tirabuzones o macarrones. (Acordate de elegir una marca certificada sin T.A.C.C si tiene que ser apto para celíacos)
- sal gruesa
- pimienta
- 2 chiles o 1 cda de salsa picante
- 2 cucharadas de miel
Preparación:
Como te darás cuenta por los ingredientes, y por la foto que le saqué, el ensopado está a medio camino entre puchero, sopa y guiso. Por lo tanto la preparación también se asemeja bastante a ese tipo de preparaciones.
Antes que nada vas a tener que pelar y lavar la verdura y trocear de forma que quede del tamaño que luego vas a servir en los platos. Después, poné a calentar el agua en una olla, y agregale sal, pimienta, ajo, cebolla y laurel. En cuanto hierva el agua hechá para la olla los zanahorias y los choclos.
Es hora de preparar los muslos de pollo. Sacale la piel y dales una pasada por la plancha para sellarlos.
Una vez que los choclos están un poco tiernos, es hora de agregar el calabacín, las papas, los boniatos y los muslos de pollo. Ahora solo tenés que esperar que se cocinen las verduras, y luego agregar los fideos secos. Cuando estén al dente, apagá el fuego y dejalo reposar unos minutos para que se terminen de cocinar los fideos y el ensopado agarre cuerpo.
Servilo en platos hondos, y por arriba agregale un poco de salsa picante mezclada con miel.
Me parece que escucho la campana… A la mesa!!!!
