Unos pancitos con gustos para la previa a la cena, siempre vienen bien. Esta versión es apta para celíacos y te la recomiendo si no querés pasarte la noche controlando que no contaminen ninguna de las salsas. Yo ya tengo varios prontos y congelados para sacar esa noche.
Seguramente el grupo familiar ya está acostumbrado a compartir la mesa con un celíaco, pero cuando se reúne la familia en pleno, es preferible evitar confusiones. En casa optamos por una mesa gluten free para navidad.
Podés hacerlos de espinaca, de zanahoria, de cebolla, de ajo, de remolacha o probar diferentes combinaciones. Yo elegí para esta oportunidad el de zanahorias y el de cebolla. Hacelos con tiempo y congelalos, ya que este tipo de pan hay que consumirlos rápidamente o conservar en el freezer.
Ingredientes:
- 45 grs de levadura fresca
- 1 cda. de azúcar
- 450 grs. de harina de arroz
- 150 grs de almidón de maiz
- 150 grs de fécula de mandicoa
- 2 ctas. de sal
- pimienta recién molida
- 70 grs de leche entera en polvo
- 15 grs de goma guar
- 70 grs de manteca a temperatura ambiente
- 2 huevos
- 2 zanahorias ralladas
- 2 cebollas
- 3 dientes de ajo
- orégano
- romero
Preparación:
Disolver la levadura con el azúcar y 3/4 taza de agua tibia.
Mezclar las harinas, las féculas, la leche en polvo, sal, condimentos y la goma guar; cernir por lo menos dos veces. Hacer un hueco en el centro y agregar los huevos y la manteca y la mezcla con la levadura. Dividir la masa en 2 (o más, según la cantidad de gustos que vayas a preparar) . Agregar a una parte las zanahorias ralladas, un diente de ajo y orégano seco. A la otra mitad agregarle las cebollas picadas, 2 dientes de ajo y romero.
Colocar en moldes chicos de papel aluminio (enmantecados y enharinados) hasta la mitad, y dejar leudar. Llevar a horno moderado controlando el punto de cocción. Tener en cuenta que el tipo de harina y féculas utilizados no se doran como las de trigo. Controlar el punto de cocción con un palito de brochettes.
Los que no vayas a consumir en el día, los tenés que envolver en papel aluminio (cuando están tibios) y guardar en el freezer. Si ya estás acostumbrado a cocinar para celíacos, sabés que son harinas un poco más difíciles de maniobrar, pero lo principal es que no contamines ninguna de las preparaciones. La recomendación principal es que no manipules a la vez ingredientes gluten free con otros que pueden no ser aptos para celíacos.
Sacalos del freezer el día que los vayas a consumir. Dejá que se descongelen a temperatura ambiente (sin sacar del papel aluminio), y a último momento dales un toque de horno. Y no te olides de agradecerle al que tiene que comer sin T.A.C.C. la oportunidad de probar este pan calentito y sabroso.
