El crumble es otra variedad de las tartas o pasteles de frutas tradicionales. ¿Te acordás cuando la abuela de los dibujitos animados ponía el pastel, recién horneado, a enfriar en la ventana? Y a vos y a mí se nos hacía agua la boca mientras mirábamos al perro o gato de la historieta tratando de alcanzarlo. En mi casa, y en las del barrio, se hacía la torta dada vuelta de frutas, pero «aquel pastel» era el sueño de todas las mascotas y niños de cualquier vecindario del hemisferio sur.
Si vos pertenecés a esa misma generación, si sufriste viéndolo desaparecer dentro de la casa, y sentiste como te cerraban la ventana en la cara…te invito a superar ese trauma y preparar nuestro propio pastel de frutas.
Este crumble de peras es el primo fashion de aquel pastel. Es sencillo de preparar , solo tenés que aplicar la técnica de las etapas, de la que ya hemos conversado.
Ingredientes:
- 150 grs manteca
- 150 grs harina
- 150 grs azúcar rubia
- 1 cta canela en polvo
- sal
- 200 grs de frutos secos (nueces, almendras)
- 1 kilo de peras
- 25 grs. de manteca
- 3 cdas de azúcar rubia o miel
Preparación:
- Deshacer la manteca dentro de la harina, hasta dejar como arena. LLevar a la heladera por lo menos durante una hora.
- Agregar el azúcar y trabajar con las manos, y volver a guardar en la heladera.
- Agregar los frutos secos y reservar siempre en el frío.
- Pelar las peras y sacarles los centros. Colocar en un sartén, junto con la manteca y el azúcar rubio y llevar al fuego hasta que se cocine la fruta. Dejar enfriar.
- Colocar las peras en una fuente apta para horno. Verter encima el crocante y llevar al horno hasta dorar.
También se puede hacer de manzana, utilizando la misma técnica. El crumble se puede servir a temperatura ambiente para una merienda, o tibio y acompañado de helado de crema como postre.
Es tu oportunidad de sacarte las ganas.